Así que en todo traten ustedes a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes. De hecho, esta es la enseñanza de la Ley y de los Profetas.
Traten a los demás tal y como quieren que ellos los traten a ustedes.
Debes hacer esto para que todos amen con un corazón sincero. Que su amor sea el resultado de una conciencia tranquila y de una fe honesta.
»No piensen que he venido a eliminar las enseñanzas de la Ley o los Profetas; no he venido a eliminarlas, sino a cumplirlas.
Si ustedes de veras cumplen la ley suprema de la Escritura, que dice: «Ama a tu prójimo como a ti mismo», entonces harán bien.