Cuando la gente esté diciendo: «Paz y seguridad», vendrá sobre ellos la destrucción sin avisar, como le llegan a la mujer embarazada los dolores de parto. De ninguna manera podrán escapar.
Se levantará nación contra nación, y reino contra reino. Habrá terremotos en diferentes lugares; también habrá hambre. Esto será apenas el comienzo de los dolores.
»Pero, antes de todo esto, los perseguirán y los arrestarán. Los entregarán a las sinagogas y a las cárceles. Por causa de mi nombre los llevarán ante reyes y gobernadores.