―Cuídense de los maestros de la Ley. Les gusta pasearse con ropas lujosas y les encanta que los saluden en las plazas. También les gusta ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los lugares de honor en los banquetes.
Como parte de su enseñanza Jesús decía: ―Tengan cuidado de los maestros de la Ley. Les gusta pasearse con ropas lujosas y que los saluden en las plazas.