Pues bien, había entre nosotros siete hermanos. El primero se casó y murió y, como no tuvo hijos, dejó la esposa a su hermano.
Dios estableció que los seres humanos mueran una sola vez, y que después venga el juicio.
―Maestro, Moisés nos enseñó qué hacer cuando un hombre muere sin dejar hijos. Dijo que el hermano de ese hombre tiene que casarse con la viuda para darle un hijo a su hermano.
Lo mismo les pasó al segundo y al tercer hermano, y así hasta llegar al séptimo.