Y, por la falta de fe de ellos, no hizo allí muchos milagros.
De acuerdo. Pero ellos fueron rechazados por su falta de fe, y tú aceptado por la fe. Así que no seas orgulloso, sino temeroso.
Y se sentían ofendidos a causa de él. Pero Jesús les dijo: ―En todas partes se honra a un profeta, menos en su tierra y en su propia casa.
En aquel tiempo el gobernador Herodes se enteró de lo que decían de Jesús