Si el Señor no hubiera acortado esos días, nadie sobreviviría; pero, por causa de los que él ha elegido, los ha acortado.
Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría; pero, por causa de los elegidos, se acortarán.
Porque serán días de gran sufrimiento, como no lo ha habido desde el principio, cuando Dios creó el mundo, ni lo habrá jamás.
Entonces, si alguien les dice a ustedes: “¡Miren, aquí está el Cristo!” o “¡Miren, allí está!”, no lo crean,