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Referencias Cruzadas

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Marcos 10:2

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Algunos fariseos se le acercaron y, para ponerlo a prueba, le preguntaron: ―¿Está permitido que un hombre se divorcie de su esposa?

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25 Referencias Cruzadas  

Con esta pregunta le estaban tendiendo una trampa, para tener de qué acusarlo. Pero Jesús se inclinó y con el dedo comenzó a escribir en el suelo.

»¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, hipócritas! Les cierran a los demás el reino de los cielos, y ni entran ustedes ni dejan entrar a los que intentan hacerlo.

Tampoco provoquen el enojo de Cristo, como lo hicieron algunos y murieron mordidos por serpientes.

Por su parte, los jefes de los sacerdotes y los fariseos habían dado la orden de que, si alguien sabía dónde estaba Jesús, debía denunciarlo para arrestarlo.

Entonces los jefes de los sacerdotes y los fariseos citaron a una reunión del tribunal. ―¿Qué vamos a hacer? —dijeron—. Este hombre está haciendo muchas señales milagrosas.

¿Acaso ha creído en él alguno de los gobernantes o de los fariseos?

Los fariseos oyeron a la gente que murmuraba estas cosas acerca de él. Entonces, junto con los jefes de los sacerdotes, mandaron unos guardias del Templo para arrestarlo.

Los fariseos oían todo y se burlaban de Jesús, porque les encantaba el dinero.

―Resulta que ustedes los fariseos —les dijo el Señor— limpian el vaso y el plato por fuera. Sin embargo, por dentro están ustedes llenos de robo y de maldad.

Pero los fariseos y los expertos en la Ley no quisieron ser bautizados por Juan. Rechazaron así el propósito que Dios tenía para ellos.

Así que los maestros de la Ley y los fariseos no le quitaban la vista de encima, para ver si sanaba en sábado. Buscaban un motivo para acusar a Jesús.

Pero los fariseos y los maestros de la Ley, que eran de un mismo grupo, criticaban a los discípulos de Jesús: ―¿Por qué comen y beben ustedes con cobradores de impuestos y con pecadores?

―Tengan cuidado —les dijo Jesús—; ¡ojo con la levadura de los fariseos y con la de Herodes!

Llegaron los fariseos y comenzaron a discutir con Jesús. Para ponerle una trampa, le pidieron una señal del cielo.

Uno de ellos, experto en la Ley, le tendió una trampa con esta pregunta:

Algunos fariseos se le acercaron y, para ponerlo a prueba, le preguntaron: ―¿Está permitido que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier motivo?

Los fariseos y los saduceos se acercaron a Jesús y, para ponerle una trampa, le pidieron que les mostrara una señal del cielo.

Entonces se le acercaron los discípulos y le dijeron: ―¿Sabes que los fariseos se ofendieron al oír eso?

Pero los fariseos afirmaban: «Este echa fuera a los demonios por medio del príncipe de los demonios».

Jesús salió de aquel lugar y se fue a la región de Judea y al otro lado del Jordán. Otra vez se le juntó mucha gente y, como era su costumbre, les enseñaba.

―¿Qué les mandó Moisés? —respondió Jesús.




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