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Referencias Cruzadas

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Lucas 9:48

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

―El que recibe en mi nombre a este niño —les dijo—, me recibe a mí. Y el que me recibe a mí recibe al que me envió. El que es menos importante entre todos ustedes, ese es el más importante.

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23 Referencias Cruzadas  

Porque todo el que se cree mejor que los demás será humillado, y el que se humilla será considerado el mejor.

Sean humildes y acepten la autoridad y poder de Dios, para que él los trate como a gente importante a su debido tiempo.

Pero que no sea así entre ustedes. Al contrario, el mayor debe comportarse como el menor, y el que manda, como el que sirve.

Les aseguro que el que recibe al que yo envío me recibe a mí. Y el que me recibe a mí recibe al que me envió».

»El que los escucha a ustedes me escucha a mí. El que los rechaza a ustedes me rechaza a mí. Y el que me rechaza a mí rechaza al que me envió».

Al vencedor le daré el derecho de sentarse conmigo en mi trono. Así como también yo vencí y me senté con mi Padre en su trono.

Por tanto, el que rechaza estas instrucciones no rechaza a un hombre, sino a Dios, quien les da a ustedes su Espíritu Santo.

¿Quién es el que me ama? El que hace suyos mis mandamientos y los obedece. Y al que me ama, mi Padre lo amará. Y yo también lo amaré y me mostraré a él».

Quiero que coman y beban a mi mesa en mi reino y se sienten en tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.

Les digo que entre la gente no ha habido nadie más importante que Juan. Sin embargo, el menos importante en el reino de Dios es más importante que él».

―El que recibe en mi nombre a un niño como este me recibe a mí. Y el que me recibe a mí no solo me recibe a mí, sino al que me envió.

Él les responderá: “Les aseguro que todo lo que no hicieron por el menos importante de mis hermanos, tampoco lo hicieron por mí”.

El Rey les responderá: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el menos importante, lo hicieron por mí”.

―Les aseguro —respondió Jesús— que en la renovación de todas las cosas, cuando el Hijo del hombre se siente en su trono glorioso, ustedes que me han seguido se sentarán también en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.

Así también el Padre de ustedes que está en el cielo no quiere que se pierda ninguno de estos pequeños.

»Miren que no menosprecien a uno de estos pequeños. Pues les digo que en el cielo los ángeles de ellos contemplan siempre el rostro de mi Padre celestial.

La muralla de la ciudad tenía doce cimientos. En estos estaban los nombres de los doce apóstoles del Cordero.




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