Tengan cuidado, no sea que se eche a perder todo lo que hemos logrado con nuestro trabajo, y entonces ustedes se pierdan de recibir la recompensa completa.
El administrador reflexionó: “¿Qué voy a hacer ahora que mi patrón está por quitarme el puesto? No tengo fuerzas para cavar, y me da vergüenza pedir dinero.
»En el libro de los Salmos —continuó Pedro— está escrito: »“Que su lugar quede vacío, y que nadie lo habite”. También está escrito: »“Que otro se haga cargo de su oficio”.