Les digo que en aquella noche estarán dos personas en una misma cama: una será llevada y la otra será dejada.
Todo esto demuestra que el Señor sabe librar de la tentación a los que viven como Dios quiere. Pero también sabe castigar a los malvados, y lo hará cuando llegue el día del juicio.
Fíjense que se lo he dicho a ustedes de antemano.
―Esfuércense por entrar por la puerta estrecha —contestó—, porque les digo que muchos tratarán de entrar y no podrán.
Así que tengan cuidado; se lo he dicho a ustedes de antemano.
¡Les digo que no! De la misma manera, todos ustedes morirán, a menos que se arrepientan».
¡Les digo que no! De la misma manera, todos ustedes morirán, a menos que se arrepientan.
―Aunque todos te abandonen, yo no —declaró Pedro.
El que procure salvar su vida la perderá; y el que la pierda la salvará.
Dos mujeres estarán moliendo juntas: una será llevada y la otra será dejada».