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Referencias Cruzadas

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Juan 14:10

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

¿Acaso no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo les hablo, no las hablo como cosa mía. El Padre, que está en mí, es el que hace sus obras.

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26 Referencias Cruzadas  

Entonces Jesús afirmó: ―Les aseguro que el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta, sino solamente lo que ve que su Padre hace. Todo lo que hace el Padre, lo hace también el Hijo.

Pero, si las hago, aunque no me crean a mí, crean a mis obras. Así sabrán y entenderán que el Padre está en mí y que yo estoy en el Padre.

Me refiero a Jesús de Nazaret. Dios lo llenó de poder y del Espíritu Santo. Él anduvo haciendo el bien y sanando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.

Yo no he hablado por mi propia cuenta. El Padre que me envió me ordenó qué decir y cómo decirlo.

Por eso Jesús añadió: ―Cuando hayan levantado al Hijo del hombre, sabrán ustedes que yo soy quien afirmo ser. Y sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, sino que hablo conforme a lo que el Padre me ha enseñado.

En Cristo está presente todo el poder de Dios.

Les he entregado las palabras que me diste, y ellos las aceptaron. Saben con certeza que salí de ti y han creído que tú me enviaste.

Pero Jesús les respondía: ―Mi Padre aún hoy está trabajando, y yo también trabajo.

Tres cosas son las que dicen que esto es cierto,

Un mensaje que le dice al mundo que Dios envió a Cristo para reconciliarnos con él. Nuestros pecados fueron perdonados, y se nos encargó la predicación de este mensaje de reconciliación.

Yo hablo de lo que he visto en presencia del Padre. Así también ustedes, hagan lo que del Padre han escuchado.

Dios quiso poner en él todo su poder,

En aquel día ustedes sabrán que yo estoy en mi Padre, y ustedes en mí, y yo en ustedes.

―Mi enseñanza no es mía —respondió Jesús—, sino del que me envió.

Ustedes, en cambio, quieren matarme a mí, que les he dicho la verdad que he recibido de parte de Dios. ¡Abraham jamás haría tal cosa!

Y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. ¿Crees esto?

Este fue de noche a visitar a Jesús. ―Maestro —le dijo—, sabemos que has venido de parte de Dios. Pues nadie podría hacer las señales milagrosas que tú haces si Dios no estuviera con él.

Créanme cuando les digo que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí. Si no, al menos créanme por las obras mismas.

El que no me ama no obedece mis palabras. Pero estas palabras que ustedes oyen no son mías, sino del Padre, que me envió.




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