Dios llamó “dioses” a aquellos para quienes vino la palabra. ¡Y la Escritura no se puede poner en duda!
El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán.
Todos deben respetar a las autoridades públicas. Dios es quien da autoridad a los gobernantes, así que las que existen fueron establecidas por él.
Es más fácil que desaparezcan el cielo y la tierra que deje de cumplirse el más pequeño mandamiento de la Ley.
«Hermanos en la fe, tenía que cumplirse lo indicado en la Escritura. Por medio de David, el Espíritu Santo había revelado lo que haría Judas, quien sirvió de guía a los que arrestaron a Jesús.
Lo crucificaron y repartieron su ropa, echando suertes.
Les aseguro que, mientras existan el cielo y la tierra, ni una letra ni una tilde de la Ley desaparecerán hasta que todo se haya cumplido.
Después de esto, como Jesús sabía que ya todo había terminado, y para que se cumpliera la Escritura, dijo: ―Tengo sed.
―¿Y acaso —respondió Jesús— no está escrito en su Ley: “Yo les he dicho: ‘Ustedes son dioses’ ”?
Entonces, ¿por qué me acusan de ofender a mi Padre, quien me apartó para enviarme al mundo? ¿Tan solo porque dije: “Yo soy el Hijo de Dios”?