Le pidieron con insistencia a Festo que les hiciera el favor de trasladar a Pablo a Jerusalén. Lo cierto es que ellos estaban planeando matarlo en el camino.
y se quedó ahí tres meses. Cuando estaba a punto de salir en barco para Siria, supo que los judíos estaban planeando hacer algo contra él. Por eso, decidió regresar por Macedonia.
Si soy culpable de haber hecho algo que merezca la muerte, no me niego a morir. Pero, si no son ciertas las acusaciones que presentan contra mí, nadie tiene el derecho de entregarme a ellos para verlos contentos. ¡Que el mismo césar me juzgue!
Cuando me informaron que se planeaba una trampa para matar a este hombre, decidí enviarlo ante usted en seguida. También les ordené a sus acusadores que presentaran delante de usted las acusaciones que tengan contra él.