Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Hechos 8:12

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Pero Felipe les anunció la buena noticia del reino de Dios y el nombre de Jesucristo. Entonces, tanto hombres como mujeres creyeron y se bautizaron.

Ver Capítulo Copiar

22 Referencias Cruzadas  

―Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados —les contestó Pedro—. Entonces recibirán el don del Espíritu Santo.

Después de sufrir la muerte, se les presentó y les dio muchas pruebas convincentes de que estaba vivo. Durante cuarenta días se les apareció y les habló acerca del reino de Dios.

Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones. Bautícenlos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.

El agua simboliza el bautismo que ahora los salva también a ustedes. El bautismo no consiste en la limpieza del cuerpo, sino en comprometerse ante Dios en tener una conciencia limpia. Esta salvación es posible por la resurrección de Jesucristo.

Así pues, los que recibieron su mensaje fueron bautizados. Aquel día se unieron a la iglesia unas tres mil personas.

Ya no importa si son judíos o griegos, esclavos o libres, hombres o mujeres, sino que todos ustedes son iguales gracias a Cristo Jesús.

Pues, si crees de corazón, Dios te aceptará como justo y, si con tu boca confiesas que Cristo es el Señor, serás salvo.

Sin embargo, en el pueblo del Señor, ni la mujer existe aparte del hombre ni el hombre aparte de la mujer.

Predicaba del reino de Dios y enseñaba acerca del Señor Jesucristo sin impedimento y sin temor alguno.

»Escuchen, yo sé que ninguno de ustedes volverá a verme. Pero a todos les he anunciado el mensaje del reino de Dios.

A judíos y a griegos les he dicho que se arrepientan ante Dios y que crean en nuestro Señor Jesús.

Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su familia. También creyeron y fueron bautizados muchos de los corintios que oyeron a Pablo.

Sin embargo, había entre ellos algunas personas de Chipre y de Cirene. Estas personas llegaron a Antioquía y comenzaron a hablarles también a los de habla griega. Les anunciaron la buena noticia acerca del Señor Jesús.

Y seguía aumentando el número de los que creían en el Señor.

―Deja que los muertos entierren a sus muertos, pero tú ve y anuncia el reino de Dios —le respondió Jesús.

Entonces los envió a predicar el reino de Dios y a sanar a los enfermos.

Los que habían huido a otras regiones predicaban el mensaje de la buena noticia por dondequiera que iban.

Al oír esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios