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Referencias Cruzadas

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Hechos 28:2

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Los isleños nos trataron con toda clase de atenciones. Encendieron una fogata y nos invitaron a acercarnos, porque estaba lloviendo y hacía frío.

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19 Referencias Cruzadas  

No se olviden de practicar la hospitalidad, pues gracias a ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles.

En esta nueva manera de vivir no importa si eres griego o judío, si estás circuncidado o no lo estás, si eres extranjero o un salvaje, si eres esclavo o eres libre. Cristo es todo lo que importa, y él vive en todos nosotros.

Ese es mi deber con todos, sean cultos o incultos, sabios o ignorantes.

He pasado muchos trabajos y dificultades, y muchas veces me he quedado sin dormir. He sufrido hambre y sed, y muchas veces me he quedado en ayunas. He sufrido frío y desnudez.

Al ver la serpiente colgada de la mano de Pablo, los isleños se pusieron a comentar entre sí: «Sin duda este hombre es un asesino, pues, aunque se salvó del mar, la justicia divina no va a permitir que siga con vida».

Pero, si no entiendo el significado de lo que alguien me dice, esa persona pensará que soy un extranjero, y yo pensaré lo mismo de ella.

Y quien dé siquiera un vaso de agua fresca a uno de mis discípulos menos importantes, les aseguro que no perderá su recompensa».

Al día siguiente, hicimos una parada en Sidón. El capitán Julio, con mucha amabilidad, le permitió a Pablo visitar a sus hermanos en la fe para que lo atendieran.

El que no está físicamente circuncidado, pero obedece la Ley, te condenará a ti. Pues tú, aunque tienes el mandamiento escrito y la circuncisión, no obedeces la Ley.

Como hacía frío, los criados y los guardias hicieron una fogata. Estaban de pie, alrededor del fuego, y Pedro estaba con ellos, calentándose.

Pablo, por su parte, recogió un montón de leña para la fogata. La estaba echando al fuego cuando una víbora que huía del calor le mordió la mano.

Reciban a los cristianos débiles, pero no para entrar en discusiones.

El que come de todo no debe menospreciar al que no come ciertas cosas. Y el que no come de todo no debe criticar al que lo hace, pues Dios lo ha aceptado.




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