Apenas dijo esto, surgió una discusión entre los fariseos y los saduceos. Así que la reunión quedó dividida.
La gente de la ciudad estaba dividida: unos estaban de parte de los judíos y otros, de parte de los apóstoles.
»No crean que he venido a traer paz a la tierra. No vine a traer paz, sino espada.
Pablo, sabiendo que algunos de ellos eran saduceos y los demás fariseos, alzó su voz y dijo ante el tribunal: ―Amigos israelitas, yo soy fariseo de pura cepa. Me están juzgando porque he puesto mi esperanza en la resurrección de los muertos.
Por un lado los saduceos sostienen que no hay resurrección, ni ángeles ni espíritus. Por su parte, los fariseos sí creen en todo esto.