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Referencias Cruzadas

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Hechos 20:16

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Pablo había decidido no parar en Éfeso para no demorarse en la provincia de Asia. Tenía prisa por llegar a Jerusalén para el día de Pentecostés, si fuera posible.

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17 Referencias Cruzadas  

Pero me quedaré en Éfeso hasta que llegue la fiesta de Pentecostés.

Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en el mismo lugar.

Después de todo lo ocurrido, Pablo tomó la decisión de ir a Jerusalén. De camino, pasó por Macedonia y Acaya. Y decía a todos: «Después de estar en Jerusalén, tengo que visitar Roma».

»Después de una ausencia de varios años, volví a Jerusalén para traerle donativos a mi pueblo y presentar ofrendas.

Allí encontramos a los discípulos y nos quedamos con ellos siete días. Ellos, advertidos por el Espíritu del peligro que corría, le dijeron a Pablo que no subiera a Jerusalén.

»Y ahora tengan en cuenta que voy a Jerusalén obligado por el Espíritu, sin saber lo que allí me espera.

Pablo había planeado viajar por tierra hasta Asón. Así que, antes de que él partiera, nosotros viajamos hacia allá en barco. Allí lo esperaríamos.

Pero nosotros salimos en barco de Filipos después de la fiesta de los Panes sin levadura. A los cinco días nos reunimos con los otros en Troas, y nos quedamos allí siete días.

pero al despedirse les prometió: «Ya volveré, si Dios quiere». Y se fue de Éfeso en un barco.

Al llegar a Éfeso, Pablo se separó de sus compañeros y entró en la sinagoga. Allí les habló a los judíos acerca de Jesús.

Llamó a la puerta de la calle, y salió a responder una criada llamada Rode.

Atravesaron la región de Frigia y Galacia, ya que el Espíritu Santo les había impedido que predicaran la palabra en la provincia de Asia.

Mientras Apolos estaba en Corinto, Pablo recorrió las regiones montañosas y llegó a Éfeso. Allí encontró a algunos discípulos.

Lo acompañaron Sópater hijo de Pirro, de Berea; Aristarco y Segundo, de Tesalónica; Gayo, de Derbe; Timoteo; y, por último, Tíquico y Trófimo, de la provincia de Asia.

Cuando llegaron, les dijo: «Ustedes saben cómo me porté todo el tiempo que estuve con ustedes, desde el primer día que vine a la provincia de Asia.




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