Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Hechos 16:13

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

El sábado salimos a las afueras de la ciudad y fuimos por la orilla del río, donde esperábamos encontrar un lugar de oración. Nos sentamos y nos pusimos a conversar con las mujeres que se habían reunido.

Ver Capítulo Copiar

17 Referencias Cruzadas  

Ellos, por su parte, siguieron su viaje desde Perge hasta Antioquía de Pisidia. El sábado entraron en la sinagoga y se sentaron.

Esto lo hizo para que ustedes sigan confiando firmes en Cristo, sin dudar ni un momento. Para que no dejen de creer en la seguridad que les da el mensaje de la buena noticia. Este es el mensaje que ustedes oyeron y que ha sido anunciado en toda la creación debajo del cielo. Y yo, Pablo, he llegado a ser predicador de ese mensaje.

Ya no importa si son judíos o griegos, esclavos o libres, hombres o mujeres, sino que todos ustedes son iguales gracias a Cristo Jesús.

Pero, al cabo de algunos días, salimos y continuamos nuestro viaje. Todos los discípulos, incluso las mujeres y los niños, nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad, y allí en la playa nos arrodillamos y oramos.

El primer día de la semana nos reunimos para partir el pan. Como iba a salir al día siguiente, Pablo estuvo hablando a los creyentes y prolongó su discurso hasta la medianoche.

Todos los sábados discutía en la sinagoga, tratando de convencer a judíos y a griegos.

Como era su costumbre, Pablo entró en la sinagoga. Y durante tres sábados seguidos discutió con ellos, haciendo uso de las Escrituras.

Atravesaron la región de Frigia y Galacia, ya que el Espíritu Santo les había impedido que predicaran la palabra en la provincia de Asia.

Al salir ellos de la sinagoga, los invitaron a que el siguiente sábado les hablaran más de estas cosas.

Al amanecer se presentó de nuevo en el Templo. Toda la gente se le acercó, y él se sentó a enseñarles.

Un sábado Jesús estaba enseñando en una de las sinagogas.

Les dijo: ―Vayan por todo el mundo y anuncien la buena noticia a toda criatura.

Era tal la cantidad de gente que se reunió para verlo que él tuvo que subir a una barca donde se sentó mientras toda la gente estaba de pie en la orilla.

En seguida se dedicó a predicar en las sinagogas, afirmando que Jesús es el Hijo de Dios.

Una vez, cuando íbamos al lugar de oración, nos salió al encuentro una joven esclava que tenía un espíritu de adivinación. Con sus poderes ganaba mucho dinero para sus amos.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios