Por eso dice en otro pasaje: »“No permitirás que el cuerpo de tu elegido se descomponga”.
Por la fe Enoc fue sacado de este mundo sin experimentar la muerte. Dios se lo llevó y, por eso, no pudo ser encontrado. Pero antes de ser llevado agradó a Dios. Así lo afirman las Escrituras.
Les aseguro que el que cumple mi palabra nunca morirá.
El que cree en el Hijo tiene vida eterna. Pero el que no cree en el Hijo no sabrá lo que es esa vida, sino que permanecerá bajo el castigo de Dios».
y le había revelado que no moriría sin antes ver al Cristo que el Señor enviaría.