Efesios 4:10

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Y el que bajó es el mismo que subió a lo más alto del cielo, para llenar todo el universo con su presencia.

Referencias Cruzadas

Hebreos 7:26

Nos convenía tener un sumo sacerdote así: santo, sin maldad, sin pecado, apartado de los pecadores y a quien se le ha dado el honor más alto en cielo.

Hebreos 4:14

En Jesús, el Hijo de Dios, tenemos un gran sumo sacerdote que ha atravesado los cielos. Por eso, sigamos confiando firmemente en la noticia que anunciamos.

Colosenses 2:9

En Cristo está presente todo el poder de Dios.

Colosenses 1:19

Dios quiso poner en él todo su poder,

Mateo 24:34

Les aseguro que todas estas cosas sucederán antes de que muera la gente de este tiempo.

1 Timoteo 3:16

No hay duda de que son grandes las verdades de nuestra fe: Cristo se presentó como hombre; fue declarado justo por el Espíritu, visto por los ángeles, y anunciado entre las naciones. El mundo ha creído en él, y Dios lo recibió con gloria.

Efesios 3:19

En fin, pido que ustedes conozcan ese amor que nuestra mente no alcanza a comprender. Porque así serán llenos de todo lo que Dios tiene y es.

Hechos 1:9

Después de decir esto, fue llevado al cielo. Mientras ellos lo miraban, una nube lo ocultó de su vista.

Hebreos 8:1

Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es este: tenemos un sumo sacerdote que se sentó en el sitio de más honor, al lado derecho del trono de la Majestad en el cielo.

Hechos 3:18

Pero de este modo Dios cumplió lo que de antemano había anunciado por medio de todos los profetas: que su Cristo tenía que sufrir.

Hechos 2:33

Dios, con su poder, le dio un sitio de honor. Y él, habiendo recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, nos lo ha dado a nosotros. Esto es lo que ustedes ahora ven y oyen.

Hechos 1:11

que les dijeron: ―Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse.

Juan 19:36

Estas cosas sucedieron para que se cumpliera la Escritura: «No le quebrarán ningún hueso».

Juan 19:28

Después de esto, como Jesús sabía que ya todo había terminado, y para que se cumpliera la Escritura, dijo: ―Tengo sed.

Juan 19:24

―No la dividamos —se dijeron unos a otros—. Echemos suertes para ver a quién le toca. Y así lo hicieron los soldados. Esto sucedió para que se cumpliera la Escritura que dice: «Se repartieron entre ellos mi ropa, y sobre ella echaron suertes».

Juan 1:16

De su abundancia todos hemos recibido grandes bondades.

Lucas 24:44

Luego les dijo: ―Cuando todavía estaba yo con ustedes, les decía que tenía que cumplirse todo lo que dicen las Escrituras acerca de mí en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos.

2 Corintios 12:2

Conozco a un seguidor de Cristo que hace catorce años fue llevado al tercer cielo (no sé si en el cuerpo o fuera del cuerpo; Dios lo sabe).