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Referencias Cruzadas

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2 Pedro 2:1

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

En el pueblo judío hubo falsos profetas, como también entre ustedes habrá falsos maestros. Estos, de forma astuta, darán falsas enseñanzas que harán mucho daño. Llegarán incluso a decir que no conocen al Señor que los salvó. Esto les traerá una repentina destrucción.

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73 Referencias Cruzadas  

»Cuídense de los falsos profetas. Vienen a ustedes disfrazados de ovejas, pero por dentro son lobos feroces.

El problema es que ciertos individuos malos se han metido secretamente entre ustedes. Son unos malvados que dicen que, ya que Dios nos ama tanto, eso nos da libertad para pecar. Además, niegan que Jesucristo sea nuestro único Dueño y Señor. El castigo de estos malvados ya estaba anunciado desde hacía mucho tiempo.

Dominados por el deseo de siempre tener más, estos maestros los engañarán para sacarles dinero. Desde hace mucho tiempo su castigo está preparado y los espera su destrucción.

Pues llegará el tiempo en que no van a querer escuchar la verdadera enseñanza. Al contrario, se dejarán dominar por sus propios deseos, y escucharán a maestros que les digan las cosas que quieren oír.

Surgirá un gran número de falsos profetas que engañarán a muchos.

El problema era que algunos falsos hermanos en la fe se habían metido entre nosotros para ver todo lo que hacíamos. Querían quitarnos la libertad que Cristo Jesús nos dio para obligarnos a seguir de nuevo las reglas judías.

Sin duda, estas divisiones se dan entre ustedes para que así se demuestre quiénes en verdad cuentan con la aprobación de Dios.

Queridos hermanos en la fe, por el mundo han salido muchos falsos profetas. Por eso, no crean a todos los que dicen hablar de parte del Espíritu. Es mejor que los pongan a prueba para ver si en verdad Dios los ha enviado.

Cuídense de que nadie los engañe con ideas y pensamientos que parecen llenos de sabiduría. Son solo enseñanzas humanas que vienen de los poderes de este mundo. No son las enseñanzas de Cristo.

Al que cause divisiones, repréndelo dos veces y, si no hace caso, aléjate de esa persona.

A esos hay que taparles la boca, ya que están arruinando familias enteras al enseñar lo que no se debe. Hacen esto para obtener ganancias por medio del engaño.

Pero a esa gente le espera la destrucción, pues adoran al dios de sus propios deseos. Se sienten orgullosos de lo que hacen, cuando debería darles vergüenza. Solo piensan en lo malo que ofrece el mundo.

pues fueron rescatados por Dios quien pagó un precio. Por tanto, den gloria a Dios con su cuerpo.

porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas. Y harán maravillas y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos.

Y entonaban este nuevo cántico: «Digno eres de recibir el rollo y de romper sus sellos, porque fuiste sacrificado. Con tu sangre compraste para Dios gente de toda tribu, idioma, pueblo y nación.

Conozco tus sufrimientos y tu pobreza. ¡Sin embargo, eres rico espiritualmente! Sé qué algunos de los que dicen ser judíos hablan mal de ti, pero ellos no son judíos. En realidad, esos no son más que un grupo controlado por Satanás.

¿Cuánto mayor castigo piensan ustedes que merece el que ha despreciado al Hijo de Dios? ¿Qué castigo recibirá el que ha rechazado la sangre de Cristo? Pues esa sangre es la del pacto por medio del cual había sido elegido por Dios. Quien así actúa ha insultado al Espíritu de Dios, quien nos ama, aunque no lo merezcamos.

No se dejen criticar de esos que mienten diciendo que son humildes y adoran ángeles. Dicen que tienen visiones, pero no es verdad. Se sienten orgullosos de su malvada manera de pensar.

Así ya no seremos como niños, que cambian de opinión fácilmente y aceptan como verdad cualquier enseñanza. Pues los falsos maestros son astutos y usan métodos engañosos.

porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas. Y harán grandes maravillas y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos.

Pero, a cualquiera que me desconozca delante de los demás, yo también lo desconoceré delante de mi Padre que está en el cielo.

Así que se le permitió hacer estas cosas con la autoridad de la primera bestia. Con estas maravillas engañó a los habitantes de la tierra. Les ordenó que hicieran una imagen para adorar a la primera bestia, que seguía con vida, a pesar de haber sido herida a espada.

Sé que vives allí donde Satanás tiene su trono. Sin embargo, sigues confiando en mí. No has abandonado tu fe en mí. Ni siquiera lo hiciste cuando mataron a Antípas, quien fielmente hablaba de mí. A él lo mataron en esa ciudad donde vive Satanás.

Ellos les decían: «En los últimos tiempos habrá burladores que vivirán según sus malos deseos».

Les escribo estas cosas acerca de los que procuran engañarlos.

Ustedes aman a Jesucristo a pesar de que no lo han visto. Aunque no lo ven ahora, creen en él y se alegran con un gozo tan grande y maravilloso que no se puede describir con palabras.

Al derramar su sangre, Cristo nos hizo libres y perdonó nuestros pecados, porque su amor es muy grande. No merecíamos tanto amor,

Adoran ídolos y practican brujería. Sienten odio, arman pelea, son celosos y se enojan fácilmente. Siembran enemistades, se oponen a todo y causan divisiones.

Los que ahora están muy interesados en ganar toda su atención, no lo hacen por su bien. Lo que quieren es alejarlos de nosotros para que ustedes se interesen en ellos.

Tales individuos no sirven a Cristo nuestro Señor, solo buscan ganancias para sí mismos. Con palabras suaves y bonitas engañan a los sencillos.

―Tengan cuidado; no se dejen engañar —les dijo Jesús—. Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y dirán: “El tiempo está cerca”. No los sigan ustedes.

¡Ay de ustedes cuando todos los elogien! Dense cuenta de que los antepasados de esta gente trataron así a los falsos profetas.

Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”. Así engañarán a muchos.

Cristo nos rescató de la maldición de la Ley. Él aceptó que esa maldición cayera sobre él. Pues las Escrituras dicen: «Maldito todo el que es colgado de un madero».

Ustedes fueron liberados del pecado por Cristo. Él pagó un alto precio por rescatarlos de esa esclavitud. Entonces, no se vuelvan esclavos de nadie.

Conozco todo lo que haces. Mira, delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas. Pero has obedecido mi mensaje y no has negado que me conoces.

Pero, al que me desconozca delante de los demás, se le desconocerá delante de los ángeles de Dios.

El que no se preocupa por ayudar a los suyos, y sobre todo a los de su propia familia, ha negado lo que dice creer y es peor que un incrédulo.

Y gritaban a gran voz: «Soberano Señor, santo y verdadero, ¿cuándo juzgarás a los habitantes de la tierra?; ¿cuándo vengarás nuestra muerte?».




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