Así que el líder debe ser alguien a quien no se le pueda acusar de nada malo. Que sea esposo de una sola mujer, que controle sus deseos, que piense bien las cosas, respetado por todos, buen hospedador y capaz de enseñar.
No tendrán compasión ni amor por nadie, serán crueles, dirán mentiras para dañar a los demás, no controlarán sus malos deseos y serán enemigos de todo lo bueno.
Tú, por el contrario, sé inteligente en todo momento, soporta los sufrimientos y dedícate a anunciar la buena noticia de salvación. Cumple con los deberes del trabajo que Dios te dio.
Los que tienen amos creyentes no deben faltarles al respeto por ser hermanos en la fe. Al contrario, deben servirles todavía mejor, porque sus servicios ayudan a creyentes y hermanos en la fe que son queridos. Esto es lo que debes enseñar y recomendar.
Han cometido toda clase de injusticia, maldad, avaricia y actos vergonzosos. Están llenos de envidia, homicidios, divisiones, engaño y maldad. Son chismosos,