Por eso siento gozo aun cuando soy débil o soy insultado, cuando tengo necesidades, soy perseguido por enemigos o cuando sufro dificultades por ser fiel a Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Dichoso el que no deja de creer en medio de las dificultades. Porque, al salir victorioso, recibirá la corona de la vida. Este es el premio que Dios ha prometido a quienes lo aman.
―Les aseguro —respondió Jesús— que todo el que haya dejado casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o terrenos por mi causa y la de la buena noticia
Ciertamente, consideramos dichosos a los que creyeron en Dios hasta el fin. Ustedes han oído hablar de Job y de cómo soportó el sufrimiento hasta el final. Bien saben que el Señor al final lo trató muy bien. Es que el Señor es muy compasivo y amoroso.