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Referencias Cruzadas

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1 Juan 3:23

Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Y este es su mandamiento: que creamos en su Hijo Jesucristo y nos amemos los unos a los otros, tal como él lo ha ordenado.

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24 Referencias Cruzadas  

»Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.

Ustedes han aceptado el verdadero mensaje de Dios, y por eso él los ha limpiado de pecado. Ahora aman con amor sincero a sus hermanos en la fe. Así que ámense de todo corazón los unos a los otros.

Y este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.

―Esta es la obra de Dios: que crean en aquel a quien él envió —les respondió Jesús.

Sobre todo, ámense los unos a los otros profundamente, porque el amor perdona gran cantidad de pecados.

Este es el mensaje que han oído desde el principio: que nos amemos los unos a los otros.

Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano.

En cuanto al amor entre hermanos en la fe, no necesitan que les escribamos, porque Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a otros.

Amen a los demás así como Cristo nos amó y murió por nosotros. Su sacrificio fue para Dios como ofrenda de olor agradable.

Entonces apareció una nube que los envolvió, de la cual salió una voz que dijo: «Este es mi Hijo amado. ¡Escúchenlo!».

El segundo se parece a este: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.

―Cree en el Señor Jesús; así tú y tu familia serán salvos —le contestaron.

Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado.

»No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí.

Este es el mensaje en el que todos deben confiar y aceptar: Cristo Jesús vino al mundo a salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.

Pero a los que lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios.

Mientras estaba en Jerusalén, durante la fiesta de la Pascua, muchos creyeron en su nombre al ver las señales milagrosas que hacía.

El que cree en él no es condenado. Pero el que no cree ya está condenado por no haber creído en el nombre del Hijo único de Dios.

Queridos hermanos en la fe, no les estoy escribiendo un mandamiento nuevo. Les escribo un mandamiento antiguo que ustedes han conocido desde el principio. Este mandamiento antiguo es el mensaje que ya oyeron.

El que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios vivirá perfectamente unido a Dios.

Les escribo estas cosas a ustedes que creen en el Hijo de Dios. Lo hago para que sepan que tienen vida eterna.




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