Yo te guío por el camino de la sabiduría, te dirijo por sendas de rectitud.
Además de ser sabio, el Maestro impartió conocimientos a la gente. Ponderó, investigó y ordenó muchísimos proverbios.
Son claras para los entendidos e irreprochables para los sabios.
Escúchenme, que diré cosas importantes; mis labios hablarán lo correcto.
me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia haciendo honor a su nombre.
Miren, yo les he enseñado los estatutos y leyes que me ordenó el Señor mi Dios, para que ustedes los pongan en práctica en la tierra de la que ahora van a tomar posesión.
Mi padre me instruyó de esta manera: «Aférrate de corazón a mis palabras; obedece mis mandamientos, y vivirás.
«¡Hijo del diablo y enemigo de toda justicia, lleno de todo tipo de engaño y de fraude! ¿Nunca dejarás de torcer los caminos rectos del Señor?
Voy por el camino de la rectitud, por los senderos de la justicia,
Así andarás por el camino de los buenos y seguirás la senda de los justos.