Así dice el Señor: «Por tres pecados de Edom y por el cuarto, no anularé su castigo: Porque persiguió a espada a su hermano y mató a las mujeres del país; porque dio rienda suelta a la ira y no dejó de alimentar el enojo.
El Señor hará que te derroten tus enemigos. Avanzarás contra ellos por un camino y huirás de ellos por siete caminos. Todos los reinos de la tierra sentirán horror al verte.
»En cuanto a los que sobrevivan, tan profundo será el temor que les infundiré en tierra de sus enemigos, que hasta el susurro de una hoja movida por el viento los pondrá en fuga. Correrán como quien huye de la espada y caerán sin que nadie los persiga.