Para impedir que Joacaz reinara en Jerusalén, el faraón Necao lo encarceló en Riblá, en el territorio de Jamat, y además impuso sobre Judá un tributo de cien talentos de plata y un talento de oro.
Su frontera occidental era el Jordán en el Arabá, desde el lago Quinéret hasta el mar del Arabá, que es el mar Muerto, en las laderas del monte Pisgá, al oriente.
También llamó a los reyes de la región montañosa del norte; a los de la región al sur del lago Quinéret; a los de la llanura y a los de Nafot Dor, al occidente.
En el valle recibieron Bet Aram, Bet Nimrá, Sucot y Zafón, junto con lo que quedaba del reino de Sijón, rey de Hesbón. Así que su territorio se extendía desde el este del Jordán hasta el sur del lago Quinéret.
y los babilonios lo capturaron. Luego lo llevaron ante el rey de Babilonia, que estaba en Riblá, en el territorio de Jamat. Allí Nabucodonosor dictó su sentencia contra Sedequías.
Abarcaba también la parte oriental del Arabá hasta el lago Quinéret y de allí al mar del sur, que es el mar Muerto, por la vía de Bet Yesimot y más al sur, hasta las laderas del monte Pisgá.