En aquel tiempo, el Señor designó a la tribu de Leví para llevar el arca del pacto y estar en su presencia; además, para ministrar y pronunciar bendiciones en su nombre, como hasta hoy lo hace.
»Entonces se pondrá en marcha la Tienda de reunión junto con el campamento de los levitas que está situado en medio de los demás campamentos. Partirán en el mismo orden en que hayan acampado, cada uno en su lugar y bajo su estandarte.
De modo que tenían a su cargo el cuidado de la Tienda de reunión y del Lugar Santo. El servicio que realizaban en el Templo del Señor quedaba bajo las órdenes de sus hermanos, los descendientes de Aarón.
Así que, hijos míos, no sean negligentes, pues el Señor los ha escogido a ustedes para que estén en su presencia, le sirvan, sean sus ministros y le quemen incienso».
Luego, según lo que está escrito en el libro de Moisés, instalaron a los sacerdotes en sus turnos y a los levitas en sus funciones, para el culto que se ofrece a Dios en Jerusalén.
Estos y sus hijos estuvieron a cargo del canto: De los descendientes de Coat, el cantor Hemán fue hijo de Joel, descendiente en línea directa de Samuel,
Su función consistía en ayudar a los descendientes de Aarón en el servicio del Templo del Señor. Eran los responsables de los atrios, de los cuartos y de la purificación de todas las cosas santas; en fin, de todo lo relacionado con el servicio del Templo de Dios.