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Referencias Cruzadas

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Números 23:9

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Desde la cima de las peñas lo veo; desde las colinas lo contemplo: es un pueblo que vive apartado, que no se cuenta entre las naciones.

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15 Referencias Cruzadas  

¡Vive seguro, Israel! ¡Habita sin enemigos, fuente de Jacob! Tu tierra está llena de trigo y de vino nuevo; tus cielos destilan rocío.

Cuando el Altísimo dio su herencia a las naciones, cuando dividió a toda la humanidad, estableció límites a los pueblos según el número de los hijos de Israel.

Si no vienes con nosotros, ¿cómo vamos a saber, tu pueblo y yo, que contamos con tu favor? ¿En qué seríamos diferentes de los demás pueblos de la tierra?

Entonces Amán dijo al rey Asuero: —Hay cierto pueblo disperso y separado entre los pueblos de todas las provincias del reino, cuyas leyes y costumbres son diferentes de las de todos los demás. ¡No obedecen las leyes del reino y a Su Majestad no le conviene tolerarlos!

De entre las mujeres de esos pueblos han tomado esposas para sí mismos y para sus hijos, mezclando así el linaje santo con la de los pueblos vecinos. Y los primeros en cometer tal infidelidad han sido los líderes y los oficiales».

Pero ustedes son descendencia escogida, sacerdocio regio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las obras maravillosas de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.

Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien.

Por tanto, el Señor añade: «¡Salgan de en medio de ellos y apártense! No toquen nada impuro y yo los recibiré».

«Daré la orden de sacudir al pueblo de Israel entre todas las naciones, como se sacude el trigo en una zaranda, sin que caiga a tierra ni un solo grano.

Tú, Jacob, siervo mío, no temas, porque yo estoy contigo», afirma el Señor. «Aunque aniquile a todas las naciones por las que te he dispersado, a ti no te aniquilaré. Te corregiré con justicia, pero no te dejaré sin castigo».

»¡Levántense y ataquen a esta nación indolente que vive del todo confiada, nación que no tiene puertas ni cerrojos y que vive muy aislada!», afirma el Señor.

Pastorea con tu cayado a tu pueblo, al rebaño de tu propiedad, que habita solitario en el bosque, en medio de un campo fértil. Hazlo pastar en Basán y en Galaad como en los tiempos pasados.




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