Todo esto, es decir, el resto del novillo, lo sacará del campamento y lo llevará a un lugar ritualmente puro, al vertedero de la ceniza, y dejará que se consuma sobre la leña encendida. Sobre el vertedero de la ceniza se consumirá.
Luego, sacará del campamento el resto del novillo y dejará que se consuma en el fuego, como el otro. Este es el sacrificio para el perdón por el pecado de la asamblea.
«Ordénales a los israelitas que expulsen del campamento a cualquiera que tenga una infección en la piel, o padezca de un flujo inusual, o haya quedado ritualmente impuro por haber tocado un cadáver.
Nadab y Abiú murieron en presencia del Señor cuando, en el desierto de Sinaí, le ofrecieron sacrificios con un fuego ilícito que no tenían por qué ofrecer. Como Nadab y Abiú no tuvieron hijos, solo Eleazar e Itamar ejercieron el sacerdocio en vida de su padre Aarón.
El novillo del sacrificio por el perdón y el macho cabrío del sacrificio por el perdón, cuya sangre se llevó para purificar el santuario, se sacarán del campamento, y la piel, la carne y el excremento se quemarán.
»Un hombre ritualmente puro recogerá las cenizas de la vaca y las llevará a un lugar puro fuera del campamento. Allí se depositarán las cenizas para que la comunidad israelita las use como sacrificio por el perdón, junto con el agua de purificación.