Desde Quibrot Hatavá el pueblo partió rumbo a Jazerot y allí se quedó.
Partieron de Quibrot Hatavá y acamparon en Jazerot.
Después el pueblo partió de Jazerot y acampó en el desierto de Parán.
Estas son las palabras que Moisés dirigió a todo Israel en el desierto al este del Jordán, es decir, en el Arabá, frente a Suf, entre las regiones de Parán y de Tofel, Labán, Jazerot y Dizahab.
Por eso llamaron a ese lugar Quibrot Hatavá, porque allí fue sepultado el pueblo glotón.