Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Lucas 8:47

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

La mujer, al ver que no podía pasar inadvertida, se acercó temblando y se arrojó a sus pies. En presencia de toda la gente, contó por qué lo había tocado y cómo había sido sanada al instante.

Ver Capítulo Copiar

18 Referencias Cruzadas  

La mujer, sabiendo lo que había sucedido, se acercó temblando de miedo y, arrojándose a sus pies, confesó toda la verdad.

Y él les tiene aún más cariño al recordar que todos ustedes fueron obedientes y lo recibieron con temor y temblor.

Puesto que nosotros estamos recibiendo un reino inconmovible, seamos agradecidos. Inspirados por esta gratitud, adoremos a Dios como a él le agrada, con temor reverente,

Es más, me presenté ante ustedes con tanta debilidad que temblaba de miedo.

Sirvan al Señor con temor; con temblor ríndanle alabanza.

El carcelero pidió luz, entró precipitadamente y se echó temblando a los pies de Pablo y de Silas.

Samuel hizo lo que el Señor mandó. Pero cuando llegó a Belén, los jefes del pueblo lo recibieron con mucho temor. —¿Vienes en son de paz? —preguntaron.

Al oírlo, se estremecieron mis entrañas; a su voz, me temblaron los labios; la debilidad entró en los huesos y se me aflojaron las piernas. Pero yo espero con paciencia el día en que la calamidad vendrá sobre la nación que nos invade.

Fue mi mano la que hizo todas estas cosas; fue así como llegaron a existir», afirma el Señor. «Yo estimo a los pobres y contritos de espíritu, a los que tiemblan ante mi palabra.

Ante ti, Señor, están todos mis deseos; no te son un secreto mis suspiros.

Así que, mis queridos hermanos, como han obedecido siempre —no solo en mi presencia, sino mucho más ahora en mi ausencia—, lleven a cabo su salvación con temor y temblor,

Así que las asustadas mujeres se alejaron a toda prisa del sepulcro, pero muy alegres corrieron a dar la noticia a los discípulos.

Cuando Efraín hablaba, la gente temía; él tenía la preeminencia sobre Israel. Pero rindió culto a Baal y por ese pecado murió.

Yo conozco bien a Efraín; Israel no me es desconocido. Tú, Efraín, te has prostituido; e Israel se ha contaminado.

Vengan ustedes, temerosos de Dios, escuchen, que voy a contarles todo lo que él ha hecho por mí.

—No, alguien me ha tocado —respondió Jesús—; yo sé que de mí ha salido poder.

—¡Hija, tu fe te ha sanado! —dijo Jesús—. Vete en paz.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios