Desde el mediodía y hasta las tres de la tarde toda la tierra quedó en oscuridad,
Desde el mediodía y hasta las tres de la tarde toda la tierra quedó en oscuridad.
»En aquel día», afirma el Señor y Dios, «haré que el sol se ponga al mediodía y que en pleno día la tierra se oscurezca.
El sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre antes que llegue el día del Señor, día grande y esplendoroso.
Se abrieron los sepulcros y muchos creyentes que habían muerto resucitaron.
Era el día de la preparación para la Pascua, cerca del mediodía. —Aquí tienen a su rey —dijo Pilato a los judíos.
Y el centurión, que estaba frente a Jesús, al ver cómo murió, dijo: —¡Verdaderamente este hombre era el Hijo de Dios!
¡Ay de los que suspiran por el día del Señor! ¿De qué les servirá ese día si va a ser de oscuridad y no de luz?
El sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre antes que llegue el día del Señor, día grande y terrible.
Envió tinieblas y la tierra se oscureció, pero ellos se rebelaron contra sus palabras.