Pero que los muertos resucitan lo dio a entender Moisés mismo en el pasaje sobre la zarza, pues llama al Señor “el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob”.
con lo mejor de lo que llena la tierra y el favor del que mora en la zarza ardiente. Repose todo esto sobre la cabeza de José, sobre la frente del elegido entre sus hermanos.
Además, Dios dijo a Moisés: —Di esto a los israelitas: “El Señor, el Dios de sus antepasados, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me ha enviado a ustedes. »”Este es mi nombre eterno; este es mi nombre por todas las generaciones”.
Entonces Jacob se puso a orar: «Señor, Dios de mi abuelo Abraham y de mi padre Isaac, que me dijiste que regresara a mi tierra y a mis parientes, y que me harías prosperar:
En el sueño, el Señor estaba de pie junto a él y le decía: «Yo soy el Señor, el Dios de tu abuelo Abraham y de tu padre Isaac. A ti y a tu descendencia les daré la tierra sobre la que estás acostado.