Levítico 7:26

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Vivan donde vivan, ustedes no comerán grasa ni sangre alguna, sea de ave o de otro animal.

Referencias Cruzadas

Génesis 9:4

»Pero no deberán comer carne con sangre; la sangre es vida.

Hechos 15:20

Más bien debemos escribirles que se abstengan de lo contaminado por los ídolos, de la inmoralidad sexual, de la carne de animales estrangulados y de sangre.

Levítico 3:17

»Este será un estatuto perpetuo para los descendientes de ustedes, dondequiera que habiten: no se comerán la grasa ni la sangre».

1 Timoteo 4:4

Porque todo lo que Dios ha creado es bueno y nada es despreciable si se recibe con acción de gracias,

Efesios 1:7

En él tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de su gracia

Hechos 15:29

abstenerse de lo sacrificado a los ídolos, de sangre, de la carne de animales estrangulados y de la inmoralidad sexual. Bien harán ustedes si evitan estas cosas. Con nuestros mejores deseos.

Juan 6:53

—Les aseguro —afirmó Jesús— que, si no comen la carne del Hijo del hombre ni beben su sangre, no tienen realmente vida.

Ezequiel 33:25

Por tanto, adviérteles que así dice el Señor y Dios: “Ustedes comen carne con sangre, adoran a sus ídolos y derraman sangre, ¿y aun así pretenden poseer el país?

Levítico 7:25

Todo el que coma grasa de animales presentados como ofrenda puesta al fuego ante el Señor será eliminado de su pueblo.

Levítico 7:27

Todo el que coma cualquier clase de sangre será eliminado de su pueblo».

Levítico 19:26

»No coman nada que tenga sangre. »No practiquen la agorería ni la adivinación.

Deuteronomio 12:16

Pero no deberás comer la sangre, sino que la derramarás en la tierra como si fuera agua.

Deuteronomio 12:23

Pero asegúrate de no comer la sangre, porque la sangre es la vida. No debes comer la vida con la carne.

Deuteronomio 15:23

Pero no comerás la sangre, sino que la derramarás en la tierra como si fuera agua.

Éxodo 22:30

»También serán para mí los primogénitos de tus toros y de tus ovejas. Los dejarás con sus madres siete días, pero al octavo día me los entregarás.