Levítico 26:32

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

De tal manera asolaré al país que sus enemigos que vengan a ocuparlo quedarán atónitos.

Referencias Cruzadas

Jeremías 9:11

«Convertiré a Jerusalén en un montón de ruinas, en una guarida de chacales. Convertiré en ruinas las ciudades de Judá; ¡las dejaré sin habitantes!».

Jeremías 25:11

Todo este país quedará reducido a horror y ruina; estas naciones servirán al rey de Babilonia durante setenta años”.

Jeremías 19:8

Convertiré a esta ciudad en un lugar desolado y en objeto de burla. Todo el que pase por ella quedará atónito y se burlará de todas sus heridas.

Jeremías 18:16

Así ha dejado desolada su tierra; la ha hecho objeto de burla constante. Todo el que pase por allí meneará atónito la cabeza.

Ezequiel 5:15

Cuando yo te castigue con indignación, enojo y durísimos reproches, serás objeto de burla y deshonra, y motivo de advertencia y escarmiento para las naciones que te rodean. Yo, el Señor, lo he dicho.

Jeremías 25:18

a Jerusalén y a las ciudades de Judá, a sus reyes y a sus oficiales, para convertirlos en ruinas, en motivo de horror, burla y maldición, como hoy se puede ver.

1 Reyes 9:8

Y aunque ahora este templo es imponente, llegará el día en que todo el que pase frente a él quedará asombrado y, en son de burla, preguntará: “¿Por qué el Señor ha tratado así a este país y a este templo?”.

Deuteronomio 28:37

Serás motivo de horror y objeto de burla y de ridículo en todas las naciones a las que el Señor te conduzca.

Lucas 21:20

»Ahora bien, cuando vean a Jerusalén rodeada de ejércitos, sepan que su destrucción ya está cerca.

Habacuc 3:17

Aunque la higuera no florezca ni haya frutos en las vides; aunque falle la cosecha del olivo y los campos no produzcan alimentos; aunque en el redil no haya ovejas ni vaca alguna en los establos;

Daniel 9:18

Préstanos oído, Dios nuestro; abre los ojos y mira nuestra ruina y la ciudad sobre la cual se invoca tu Nombre. Al hacerte estas peticiones, no apelamos a nuestra rectitud, sino a tu gran misericordia.

Daniel 9:2

En su primer año de reinado, yo, Daniel, comprendí ese pasaje de las Escrituras donde el Señor comunicó al profeta Jeremías que la ruina de Jerusalén duraría setenta años.

Lamentaciones 5:18

porque el monte Sión se halla desolado, y sobre él rondan los chacales.

Lamentaciones 4:12

No creían los reyes de la tierra, ni tampoco los habitantes del mundo, que los enemigos y adversarios de Jerusalén cruzarían alguna vez sus puertas.

Jeremías 44:22

Cuando el Señor ya no pudo soportar más las malas acciones y las cosas abominables que ustedes hacían, su país se convirtió en objeto de maldición, en un lugar desértico, desolado y sin habitantes, tal como está hoy.

Jeremías 44:2

«Así dice el Señor de los Ejércitos, el Dios de Israel: “Ustedes han visto todas las calamidades que yo provoqué sobre Jerusalén y sobre todas las ciudades de Judá. Hoy están desiertas y en ruinas, sin morador alguno,

Jeremías 25:38

Como león que deja abandonada su guarida, él ha dejado desolada la tierra de ellos, a causa de la espada del opresor, a causa de la ardiente ira del Señor.

Isaías 64:10

Tus ciudades santas han quedado devastadas y hasta Sión se ha vuelto un desierto; Jerusalén ha quedado en ruinas.

Isaías 24:1

Miren, el Señor arrasa la tierra y la devasta, trastorna su faz y dispersa a sus habitantes.

Isaías 6:11

Entonces exclamé: —¿Hasta cuándo, Señor? Y él respondió: —Hasta que las ciudades queden destruidas y sin habitante alguno; hasta que las casas queden deshabitadas y los campos asolados y en ruinas;

Isaías 5:9

El Señor de los Ejércitos me ha dicho al oído: «Ciertamente muchas casas quedarán devastadas y no habrá quien habite las grandes mansiones.

Isaías 5:6

La dejaré desolada y no será podada ni cultivada; le crecerán espinos y cardos. Mandaré que las nubes no derramen lluvia sobre ella».

Jeremías 12:11

La han dejado en ruinas, seca y desolada ante mis ojos; todo el país ha sido arrasado porque a nadie le importa.

Jeremías 33:10

»Así dice el Señor: “Ustedes dicen que este lugar está en ruinas, sin gente ni animales. Sin embargo, en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, que están desoladas y sin gente ni animales, se oirá de nuevo