Levítico 26:20

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

por lo que en vano agotarán sus fuerzas, y ni el suelo ni los árboles del campo darán sus frutos.

Referencias Cruzadas

Isaías 49:4

Y respondí: «En vano he trabajado; he gastado mis fuerzas sin provecho alguno. Pero mi justicia está en manos del Señor; mi recompensa está con mi Dios».

Salmos 127:1

Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes.

Deuteronomio 11:17

porque entonces se encenderá la ira del Señor contra ustedes y cerrará los cielos para que no llueva; el suelo no dará sus frutos y pronto ustedes desaparecerán de la buena tierra que les da el Señor.

Habacuc 2:13

¿Acaso no ha determinado el Señor de los Ejércitos que el trabajo de los pueblos sea solo leña para el fuego y las naciones se fatiguen por nada?

Levítico 26:4

yo enviaré lluvia a su tiempo, y la tierra y los árboles del campo darán sus frutos;

Gálatas 4:11

Temo por ustedes, que tal vez me haya estado esforzando en vano.

1 Corintios 3:6

Yo sembré, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento.

Hageo 2:16

Cuando alguien se acercaba a un montón de grano esperando encontrar veinte medidas, solo hallaba diez; y, si se iba al lagar esperando sacar cincuenta medidas del contenedor del mosto, solo sacaba veinte.

Isaías 17:11

aunque las hagas crecer el día que las plantes y las hagas florecer al día siguiente, en el día del dolor y de la enfermedad incurable la cosecha se malogrará.

Salmos 107:34

los fértiles terrenos en tierra salitrosa, por la maldad de sus habitantes.

Job 31:40

¡que nazcan en mi tierra zarzas en vez de trigo y maleza en vez de cebada!». Con esto Job dio por terminado su discurso.

Deuteronomio 28:42

Enjambres de langostas devorarán todos los árboles y las cosechas de tu tierra.

Deuteronomio 28:18

Malditos serán el fruto de tu vientre, tus cosechas, los terneritos de tus manadas y los corderitos de tus rebaños.

Deuteronomio 32:22

Se ha encendido el fuego de mi ira, que quema hasta lo profundo de los dominios de la muerte. Devorará la tierra y sus cosechas, y consumirá la raíz de las montañas.

Isaías 17:10

Porque te olvidaste del Dios de tu salvación; no te acordaste de la Roca de tu fortaleza. Por eso, aunque siembres las plantas más selectas y plantes vides importadas;

Jeremías 12:13

Sembraron trigo y cosecharon espinos; ¡de nada valió su esfuerzo! Por causa de la ardiente ira del Señor se avergonzarán de sus cosechas».

Génesis 4:12

Cuando cultives la tierra, no te dará sus frutos y en el mundo serás un fugitivo errante.

1 Reyes 18:2

Así que Elías se puso en camino para presentarse ante Acab. En Samaria había mucha hambre.

Oseas 2:11

Pondré fin a todas sus celebraciones: sus fiestas anuales, sus lunas nuevas, sus días de reposo y sus festividades.