que dijera a los israelitas: «El primer día del mes séptimo será para ustedes un día de reposo, una conmemoración con toques de trompeta, una asamblea sagrada.
«El día diez del mes séptimo es el día del Perdón. Celebrarán una asamblea sagrada en honor al Señor, y ayunarán y le presentarán ofrendas puestas al fuego.
Partiendo de ustedes, el mensaje del Señor se ha proclamado no solo en Macedonia y en Acaya, sino en todo lugar; a tal punto se ha divulgado su fe en Dios que ya no es necesario que nosotros digamos nada.
mediante poderosas señales y milagros, por el poder del Espíritu de Dios. Así que, habiendo comenzado en Jerusalén, he completado la proclamación del evangelio de Cristo por todas partes, hasta la región de Iliria.
Cuando los israelitas celebren el año del jubileo, esa heredad será incorporada a la tribu de sus esposos y se perderá como propiedad de nuestra familia patriarcal.
»Cuando celebren fiestas en fechas solemnes o festival de luna nueva, también tocarán trompetas para anunciar los holocaustos y los sacrificios de comunión. Así Dios se acordará de ustedes. Yo soy el Señor su Dios».
Siete sacerdotes llevarán trompetas y marcharán frente al arca. El séptimo día ustedes marcharán siete veces alrededor de la ciudad, mientras los sacerdotes tocan las trompetas.
En aquel día sonará una gran trompeta. Los que fueron llevados a Asiria y los que fueron desterrados a Egipto vendrán y adorarán al Señor sobre el monte santo en Jerusalén.
»Este será para ustedes un estatuto perpetuo, tanto para el nativo como para el extranjero que viva entre ustedes: El día diez del mes séptimo ayunarán y se humillarán, y no realizarán ningún tipo de trabajo.