Diles a los israelitas: “Todo el que blasfeme contra su Dios sufrirá las consecuencias de su pecado”.
Si alguien deja de celebrar la Pascua no estando impuro ni fuera del país, será eliminado de su pueblo por no haber presentado sus ofrendas al Señor en la fecha establecida. Así que sufrirá las consecuencias de su pecado.
»Si alguien peca por negarse a declarar bajo juramento lo que vio o escuchó, sufrirá las consecuencias de su pecado.
»No blasfemes nunca contra Dios ni maldigas al jefe de tu pueblo.
Pongan frente a él a dos hombres perversos y háganlos testificar que él ha maldecido tanto a Dios como al rey. Luego sáquenlo y mátenlo a pedradas».
No uses el nombre del Señor tu Dios en vano. Yo, el Señor, no tendré por inocente a quien se atreva a usar mi nombre en vano.
»No profanarás el nombre de tu Dios, entregando a tus hijos para que sean quemados como sacrificio a Moloc. Yo soy el Señor.