Así dice el Señor: «A la madre de ustedes, yo la repudié; ¿dónde está el acta de divorcio? ¿A cuál de mis acreedores los he vendido? Por causa de sus iniquidades, fueron ustedes vendidos; por las transgresiones de ustedes fue despedida su madre.
Como tres meses después, informaron a Judá lo siguiente: —Tu nuera Tamar se ha prostituido y, como resultado de sus andanzas, ha quedado embarazada. —¡Sáquenla y quémenla! —exclamó Judá.