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Referencias Cruzadas

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Jueces 2:18

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Cada vez que el Señor levantaba entre ellos un líder, el Señor estaba con él. Mientras ese líder vivía, los libraba del poder de sus enemigos, porque el Señor se compadecía de ellos al oírlos gemir por causa de quienes los oprimían y afligían.

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22 Referencias Cruzadas  

Durante todos los días de tu vida, nadie será capaz de enfrentarse a ti. Así como estuve con Moisés, también estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré.

El Señor defenderá a su pueblo cuando lo vea sin fuerzas; tendrá compasión de sus siervos cuando ya no queden ni esclavos ni libres.

quien al oír sus quejidos se acordó del pacto que había hecho con Abraham, Isaac y Jacob.

»¿Cómo podría yo entregarte, Efraín? ¿Cómo podría abandonarte, Israel? ¿Cómo puedo entregarte como a Admá? ¿Cómo puedo hacer contigo como con Zeboyín? Dentro de mí, el corazón me da vuelcos, y se me conmueven las entrañas.

Entonces Joacaz clamó al Señor, y él lo escuchó, pues vio la gran opresión del rey de Aram sobre Israel.

Entonces se deshicieron de los dioses extranjeros que había entre ellos y adoraron al Señor. Y el Señor no pudo soportar más el sufrimiento de Israel.

lamentó haber hecho al ser humano en la tierra, y le dolió en el corazón.

—Yo estaré contigo —respondió Dios—. Y te voy a dar una señal de que soy yo quien te envía: Cuando hayas sacado de Egipto a mi pueblo, todos ustedes me adorarán en esta montaña.

Al ver Dios lo que hicieron, es decir, que habían abandonado su mal camino, cambió de parecer y no llevó a cabo la destrucción que había anunciado.

¿Cuándo, Señor, te volverás hacia nosotros? ¡Compadécete ya de tus siervos!

«Por la aflicción de los oprimidos y por el gemido del pobre, voy a levantarme», dice el Señor, «y los pondré a salvo de quienes los oprimen».

»Cuando estén ya en su propia tierra y tengan que salir a la guerra contra el enemigo opresor, las trompetas darán la señal de combate. Entonces el Señor su Dios se acordará de ustedes y los salvará de sus enemigos.

Pero cuando el líder moría, ellos volvían a corromperse aún más que sus antepasados, pues se iban tras otros dioses, a los que servían y adoraban. De tal forma se negaban a abandonar sus malvadas costumbres y su obstinada conducta.

Entonces el Señor se calmó y desistió de hacer a su pueblo el daño que había sentenciado.

Pero clamaron al Señor y él hizo que surgiera un libertador, Otoniel, hijo de Quenaz, hermano menor de Caleb. Y Otoniel liberó a los israelitas.

Cuando el ángel del Señor apareció ante Gedeón, dijo: —¡El Señor está contigo, valiente guerrero!

El Señor respondió: —Tú derrotarás a los madianitas como si fueran un solo hombre, porque yo estaré contigo.

Jefté cruzó el río para luchar contra los amonitas y el Señor los entregó en sus manos.




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