En aquel día ya no me pedirán nada. Les aseguro que mi Padre les dará todo lo que pidan en mi nombre.
Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá.
Si ustedes creen, recibirán todo lo que pidan en oración.
Antes que me llamen, yo les responderé; todavía estarán hablando cuando ya los habré escuchado.
»Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá.
En aquel día pedirán en mi nombre. Y no digo que voy a rogar por ustedes al Padre,
En aquel día ustedes se darán cuenta de que yo estoy en mi Padre, ustedes en mí y yo en ustedes.
Pues por medio de él tenemos acceso al Padre por un mismo Espíritu.
Mis queridos hijos, escribo estas cosas para que no pequen. Pero si alguno peca, tenemos ante el Padre a un intercesor, a Jesucristo, el Justo.
Dijo entonces Tomás: —Señor, no sabemos a dónde vas, así que ¿cómo podemos conocer el camino?
Jesús se dio cuenta de que querían hacerle preguntas acerca de esto, entonces les dijo: —¿Se están preguntando qué quise decir cuando dije: “Dentro de poco ya no me verán”, y “un poco después volverán a verme”?
Ya podemos ver que sabes todas las cosas; ni siquiera necesitas que nadie te haga preguntas. Por esto creemos que saliste de Dios.
Judas (no el Iscariote) le dijo: —¿Por qué, Señor, estás dispuesto a manifestarte a nosotros y no al mundo?