A ellos se les asignó Quiriat Arbá, es decir, Hebrón, junto con sus campos de pastoreo, en la región montañosa de Judá. Arbá era antepasado de los anaquitas.
Hebrón se llamaba originalmente Quiriat Arbá, porque Arbá fue un importante antepasado de los anaquitas. Después de todo esto el país se vio libre de guerras.
Las poblaciones que se asignaron las recibieron los descendientes de Aarón del clan de Coat, porque ellos fueron los primeros que resultaron favorecidos en el sorteo.