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Referencias Cruzadas

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Jeremías 7:20

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

»Por eso, así dice el Señor y Dios: “Descargaré mi enojo y mi furor sobre este lugar, sobre los hombres y los animales, sobre los árboles del campo y los frutos de la tierra. Entonces, arderá mi enojo y no se apagará”.

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35 Referencias Cruzadas  

Porque así dice el Señor de los Ejércitos, el Dios de Israel: «Así como se ha derramado mi ira y mi furor sobre los habitantes de Jerusalén, así se derramará mi furor sobre ustedes si se van a Egipto. Se convertirán en objeto de maldición, de horror, de condenación y deshonra; nunca más volverán a ver este lugar».

Pero si no obedecen en consagrar el día sábado y permiten que entren cargas por las puertas de Jerusalén en sábado, entonces prenderé fuego a sus puertas que no podrá ser apagado y que consumirá los palacios de Jerusalén’ ”».

Por eso él derramó sobre ellos su ardiente ira y el furor de la guerra. Los envolvió en llamas, pero no comprendieron; los consumió, pero no lo tomaron en serio.

¿Quién podrá resistir su indignación? ¿Quién podrá soportar el ardor de su ira? Su furor se derrama como fuego; ante él se resquebrajan las rocas.

Así como se funde la plata en medio del horno, así serán fundidos ustedes en medio de la ciudad; entonces sabrán que yo, el Señor, he derramado mi ira contra ustedes”».

El Señor dio rienda suelta a su enojo; dejó correr el ardor de su ira. Prendió fuego a Sión y la consumió hasta sus cimientos.

Por eso se derramó mi ira y se encendió mi furor contra las ciudades de Judá y las calles de Jerusalén, las cuales se convirtieron en ruina hasta el día de hoy”.

«Entonces saldrán y contemplarán los cadáveres de los que se rebelaron contra mí. Porque no morirá el gusano que los devora ni su fuego se apagará. ¡Repulsivos serán a toda la humanidad!».

Ellos me han abandonado; han quemado incienso a otros dioses y con todos sus ídolos han provocado mi ira. Por eso arde mi ira contra este lugar y no se apagará’.

beberá también del excitante vino de la ira de Dios, que en la copa de su ira está puro, no diluido. Será atormentado con fuego y azufre, en presencia de los santos ángeles y del Cordero.

»Miren, ya viene el día, ardiente como un horno. Todos los soberbios y todos los malvados serán como paja; ese día les prenderá fuego hasta dejarlos sin raíz ni rama —dice el Señor de los Ejércitos—.

Todo Israel ha transgredido tu Ley y se alejaron cuando rechazaron obedecerte. Por eso, las maldiciones y los juicios escritos en la Ley de Moisés, siervo de Dios, han sido derramadas sobre nosotros, porque pecamos contra ti.

Y el pueblo al que profetizan será arrojado a las calles de Jerusalén a causa del hambre y de la espada. No habrá quien los entierre, ni a ellos ni a sus esposas, ni a sus hijos ni a sus hijas. Y derramaré sobre ellos la calamidad que se merecen”.

¿Hasta cuándo estará seca la tierra, y marchita la hierba de todos los campos? Los animales y las aves se mueren por la maldad de los que habitan el país, quienes se atreven a decir: «Dios no verá nuestro fin».

Tiene el aventador en la mano y limpiará su era recogiendo el trigo en su granero. La paja, en cambio, la quemará con fuego que nunca se apagará».

La Luz de Israel se convertirá en fuego; su Santo se volverá una llama. En un solo día quemará sus espinos y consumirá sus zarzas.

Pero yo estoy lleno de la ira del Señor, y ya no puedo contenerme. «Derrama tu ira en la calle sobre los niños, sobre los grupos de jóvenes, porque serán capturados el marido y la mujer, la gente madura y la entrada en años.

Sus casas, sus campos y sus mujeres caerán en manos extrañas, porque yo voy a extender mi mano contra los habitantes del país», afirma el Señor.

»“Voy a arrancarlos por completo”, afirma el Señor, “no encuentro uvas en la viña ni hay higos en la higuera; sus hojas están marchitas. ¡Voy, pues, a quitarles lo que les he dado!”».

El Señor te puso por nombre: «Olivo frondoso, lleno de hermosos frutos». Pero, en medio de grandes estruendos, te ha prendido fuego y tus ramas serán quebradas.

Por tu culpa perderás la herencia que yo te había dado. Te haré esclava de tus enemigos, en un país para ti desconocido, porque has encendido mi ira, la cual se mantendrá ardiendo para siempre».

Pero tú, Señor, conoces todos sus planes para matarme. ¡No perdones su iniquidad ni borres de tu presencia sus pecados! ¡Que caigan derribados ante ti! ¡Enfréntate a ellos en el momento de tu ira!

Adviértele a la dinastía de David que así dice el Señor: »“Hagan justicia cada mañana y libren al explotado del poder del opresor. No sea que mi ira se encienda como un fuego y arda sin que nadie pueda extinguirla, a causa de la maldad de sus acciones.

«Arrasaré por completo cuanto hay sobre la faz de la tierra», afirma el Señor.

entonces yo también en mi ira me opondré a ustedes. Siete veces los castigaré por sus pecados,

Llegó la hora; este es el día. Que no se alegre el que compra ni llore el que vende, porque mi enojo caerá sobre toda la multitud.

»Aunque toquen la trompeta y preparen todo, nadie saldrá a la batalla, porque mi enojo caerá sobre toda la multitud.

«Arrasaré con hombres y animales, con las aves del cielo, con los peces del mar y con los ídolos que hacen caer a los malvados. »Destruiré a toda la humanidad de sobre la faz de la tierra», afirma el Señor.

Para no oír la Ley ni las palabras que por medio de los antiguos profetas el Señor de los Ejércitos había enviado con su Espíritu; endurecieron su corazón como el diamante. Por lo tanto, el Señor de los Ejércitos se llenó de ira.




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