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Referencias Cruzadas

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Jeremías 51:6

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

»¡Huyan de Babilonia! ¡Sálvese quien pueda! No perezcan por causa de su iniquidad. Porque ha llegado la hora de que el Señor tome venganza; ¡él le dará su merecido!

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29 Referencias Cruzadas  

»¡Huyan de Babilonia; abandonen el país de los babilonios! Sean como los machos cabríos que guían al rebaño.

Se oye la voz de los fugitivos, de los que escaparon de Babilonia; vienen a anunciar en Sión la venganza del Señor nuestro Dios, la venganza por su Templo.

Griten en torno de ella: ¡Se ha rendido, cayeron sus torres, se derrumbaron sus muros! ¡Esta es la venganza del Señor! ¡Vénguense de ella! ¡Háganle lo mismo que hizo a otros!

»¡Huye de ella, pueblo mío! ¡Salva tu vida! ¡Huye de mi ardiente ira!

Ellos mismos serán esclavizados por muchas naciones y reyes poderosos. Así les daré lo que merecen su conducta y sus hechos».

Entonces Moisés advirtió a la gente: —¡Aléjense de las tiendas de estos impíos! No toquen ninguna de sus pertenencias para que ustedes no perezcan por los pecados de ellos.

La gran ciudad se partió en tres y las ciudades de las naciones se desplomaron. Dios se acordó de la gran Babilonia y le dio a beber de la copa llena del vino de la ira de su castigo.

No te apresures a imponerle las manos a nadie, no sea que te hagas cómplice de pecados ajenos. Consérvate puro.

Ustedes, los que escaparon de la espada, huyan sin demora. Invoquen al Señor en tierras lejanas y no dejen de pensar en Jerusalén».

»¡Afilen las flechas! ¡Ármense con escudos! El Señor ha incitado el espíritu de los reyes de los medos para destruir a Babilonia. Esta es la venganza del Señor, la venganza por su Templo.

»“Quisimos curar a Babilonia, pero no pudo ser sanada; abandonémosla y regrese cada uno a su tierra, porque llega su condena hasta los cielos; ¡se eleva hasta las nubes!”.

«Estoy contra ti, nación arrogante», afirma el Señor, el Señor de los Ejércitos; «al fin ha llegado el día, el día de tu castigo.

¡Salgan de Babilonia! ¡Huyan de los babilonios! Anuncien esto con gritos de alegría y háganlo saber. Publíquenlo hasta en los confines de la tierra; digan: «El Señor ha redimido a su siervo Jacob».

»Aquel día pertenece al Señor, al Señor de los Ejércitos. Será un día de venganza; se vengará de sus enemigos. La espada devorará hasta saciarse; con sangre apagará su sed. En la tierra del norte, a orillas del río Éufrates, para el Señor, el Señor de los Ejércitos, se ofrecerá un sacrificio.

Todas las naciones le servirán a él, a su hijo y a su nieto, hasta que también a su país le llegue la hora y sea sometido por numerosas naciones y grandes reyes.

Cuando ellas la beban, se tambalearán y perderán el juicio, a causa de la espada que voy a enviar contra ellos».

El que con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios se junta, saldrá mal parado.

Alégrense, naciones, con el pueblo de Dios; él vengará la sangre de sus siervos. ¡Sí! Dios se vengará de sus enemigos, y perdonará a su tierra y a su pueblo.

cuando afile mi espada reluciente y en el día del juicio la tome en mis manos, me vengaré de mis adversarios; ¡les daré su merecido a los que me odian!

En la calle, la espada los dejará sin hijos, y en sus casas reinará el terror. Perecerán los jóvenes y las doncellas, los que aún maman y los que ya se peinan canas.

¡Ya tengo planeado el día de la venganza! ¡El año de mi redención ha llegado!

¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como las zarzas del desierto!

Por eso, así dice el Señor: «¡Mira! Voy a defender tu causa y llevaré a cabo tu venganza; voy a secar el agua de su mar y dejaré secos sus manantiales.

Llega contra Babilonia el destructor; sus guerreros serán capturados y sus arcos serán hechos pedazos. Porque el Señor es un Dios que a cada cual da su merecido.

¡Dales, Señor, su merecido por todo lo que han hecho!

Señor, Dios de las venganzas; Dios de las venganzas, ¡resplandece!




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