»Después de esto, derramaré mi Espíritu sobre todo ser humano. Los hijos y las hijas de ustedes profetizarán, tendrán sueños los ancianos y los jóvenes recibirán visiones.
En ese momento se acordó José de los sueños que había tenido acerca de ellos y dijo: —¡De seguro ustedes son espías y han venido para investigar las zonas desprotegidas del país!
el Señor dijo: «Escuchen lo que voy a decirles: »Cuando un profeta del Señor se levanta entre ustedes, yo le hablo en visiones y me revelo a él en sueños.
Sus hermanos replicaron: —¿De veras crees que vas a reinar sobre nosotros y que nos vas a gobernar? Y lo odiaron aún más por los sueños que él contaba.
»En cierta ocasión, durante la época en que los animales estaban en celo, tuve un sueño. En ese sueño veía que los chivos que cubrían a las cabras eran rayados, manchados o moteados.