Lot salió a la puerta y, cerrándola detrás de sí,
El dueño de la casa salió y dijo: —No, amigos míos, no cometan tal perversidad, pues este hombre es mi huésped. ¡No cometan con él tal infamia!
Llamaron a Lot y le dijeron: —¿Dónde están los hombres que vinieron a pasar la noche en tu casa? ¡Échalos afuera! ¡Queremos tener relaciones sexuales con ellos!
les dijo: —Por favor, amigos míos, no cometan tal perversidad.