Allí tienes toda la tierra a tu disposición. Por favor, aléjate de mí. Si te vas a la izquierda, yo me iré a la derecha y si te vas a la derecha, yo me iré a la izquierda».
No abandones a tu amigo ni al amigo de tu padre; ni vayas a la casa de tu hermano el día que tengas una desgracia. Más vale vecino cercano que hermano distante.
Después de que Lot se separó de Abram, el Señor le dijo: «Abram, levanta la vista desde el lugar donde estás. Mira hacia el norte y hacia el sur, hacia el este y hacia el oeste.
Cuando ya los habían sacado de la ciudad, uno de los ángeles le dijo: —¡Escápate! No mires hacia atrás ni te detengas en ninguna parte del valle. Huye hacia las montañas, no sea que perezcas.
Lot levantó la vista y observó que todo el valle del Jordán era tierra de regadío, como el jardín del Señor o como la tierra de Egipto en dirección a Zoar. Así era antes de que el Señor destruyera a Sodoma y a Gomorra.
Abram se quedó a vivir en la tierra de Canaán, mientras que Lot se fue a vivir entre las ciudades del valle, estableciendo su tienda de campaña cerca de la ciudad de Sodoma.
Por el oriente, la frontera entre la tierra de Israel y Jaurán, Damasco y Galaad será el río Jordán hasta la ciudad de Tamar, que está junto al mar Muerto; esta será la frontera oriental.