Ellos pastorearán a Asiria con la espada y a la tierra de Nimrod con la daga. Si Asiria llegara a invadir nuestro país, si llegara a cruzar nuestras fronteras, ¡él nos rescatará!
que por las aguas del río Nilo envía emisarios en barcas de juncos! Vayan, veloces mensajeros, a una nación de gente alta y de piel brillante, a un pueblo temido por doquier, a una nación agresiva y dominante, cuya tierra está surcada por ríos.