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Referencias Cruzadas

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Éxodo 15:26

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Les dijo: «Yo soy el Señor su Dios. Si escuchan mi voz y hacen lo que yo considero justo, y si cumplen mis mandamientos y estatutos, no traeré sobre ustedes ninguna de las enfermedades que traje sobre los egipcios. Yo soy el Señor que les devuelve la salud».

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42 Referencias Cruzadas  

Él perdona todos tus pecados y sana todas tus dolencias;

El Señor te mantendrá libre de toda enfermedad y alejará de ti las horribles enfermedades que conociste en Egipto; en cambio, las reservará para tus enemigos.

»Adora al Señor tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. »Yo apartaré de ustedes toda enfermedad.

sana a los de corazón quebrantado y venda sus heridas.

»”Sin embargo, les daré salud y los curaré; los sanaré y haré que disfruten de abundante paz y seguridad.

¡Vengan, volvámonos al Señor! Él nos ha despedazado, pero nos sanará; nos ha herido, pero nos vendará.

Yo soy el Señor su Dios que los saqué de Egipto para que dejaran de ser esclavos. Yo rompí las varas de su yugo y los hice caminar con la cabeza erguida.

Porque él hiere, pero venda la herida; golpea, pero sana con sus manos.

Todas las horribles enfermedades de Egipto, que tanto espanto te causaron, vendrán sobre ti y no te darán respiro.

Ten el cuidado de obedecer todas estas palabras que yo te he dado, para que siempre te vaya bien, lo mismo que a tu descendencia. Así habrás hecho lo bueno y lo recto a los ojos del Señor tu Dios.

Voy a hacerlo así porque me han abandonado y adoran a Astarté, diosa de los sidonios, a Quemós, dios de los moabitas, y a Moloc, dios de los amonitas. No han seguido mis caminos, no han hecho lo que me agrada ni han cumplido mis estatutos y leyes como lo hizo David, su padre.

He visto sus caminos, pero lo sanaré; lo guiaré y lo colmaré de consuelo. Y a los que lloran por él

Así será, siempre y cuando obedezcas todos estos mandamientos que te ordeno hoy y hagas lo recto ante el Señor tu Dios.

«Regresa y dile a Ezequías, gobernante de mi pueblo, que así dice el Señor, Dios de su antepasado David: “He escuchado tu oración y he visto tus lágrimas. Voy a sanarte y, en tres días, podrás subir al Templo del Señor.

El Señor te afligirá con tumores y úlceras, como las de Egipto, y con sarna y comezón, y no podrás sanar.

»Supongamos que hay un hombre justo que practica el derecho y la justicia.

¿No queda bálsamo en Galaad? ¿No queda allí médico alguno? ¿Por qué no se ha restaurado la salud de mi pueblo?

Josías hizo lo que agrada al Señor, pues en todo siguió el buen ejemplo de su antepasado David; no se desvió de él en el más mínimo detalle.

»Si se conducen según mis estatutos y obedecen fielmente mis mandamientos,

Si haces todo lo que te ordeno, sigues mis caminos y haces lo que me agrada, cumpliendo mis estatutos y mandamientos como lo hizo David mi siervo, estaré contigo. Estableceré para ti una dinastía tan firme como la que establecí para David, y te daré Israel.

Si no te empeñas en practicar todas las palabras de esta ley, que están escritas en este libro, ni temes a este glorioso e imponente nombre del Señor tu Dios,

A medianoche el Señor hirió de muerte a todos los primogénitos egipcios, desde el primogénito del faraón en el trono hasta el primogénito del preso en la cárcel, así como a las primeras crías de todo el ganado.

Si ahora ustedes me son del todo obedientes y cumplen mi pacto, serán mi propiedad exclusiva entre todas las naciones. Aunque toda la tierra me pertenece,

ustedes serán para mí un reino de sacerdotes y una nación santa”. »Comunícales todo esto al pueblo de Israel».

«Yo soy el Señor tu Dios. Yo te saqué de Egipto, del país donde eras esclavo.

No comas la sangre, para que te vaya bien a ti y a tu descendencia, pues estarás haciendo lo recto a los ojos del Señor.

»¡Vean ahora que yo soy único! No hay otro dios fuera de mí. Yo doy la muerte y devuelvo la vida, causo heridas y doy sanidad. Nadie puede librarse de mi mano.

Eliseo fue al manantial y al arrojar allí la sal, exclamó: —Así dice el Señor: “¡Yo purifico esta agua para que nunca más cause muerte ni esterilidad!”.

Lo que sí ordené fue lo siguiente: ‘Obedézcanme. Así yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo. Condúzcanse conforme a todo lo que yo ordene, a fin de que les vaya bien’.

Desde el día en que hice salir a sus antepasados de la tierra de Egipto hasta el día de hoy, una y otra vez he advertido: ‘Obedézcanme’.

»” ’Si de veras me obedecen —afirma el Señor—, y no meten ninguna carga por las puertas de esta ciudad en día sábado, sino que consagren este día no haciendo ningún trabajo,

Porque yo restauraré tu salud y sanaré tus heridas”, afirma el Señor, “porque te han llamado la desechada, la pobre Sión, la que a nadie le importa”.

Moisés rogó al Señor: «¡Oh Dios, te ruego que la sanes!».

Moisés convocó a todo Israel y dijo: Escuchen, israelitas, los estatutos y las leyes que yo les comunico hoy. Apréndanlos y procuren ponerlos en práctica.

No tendrás ningún dios extranjero, ni te postrarás ante ningún dios extraño.

Presten atención y vengan a mí, escúchenme y vivirán. Haré con ustedes un pacto eterno, conforme a mi inquebrantable amor por David.

Fui quien enseñó a caminar a Efraín, tomándolo de los brazos. Pero él no quiso reconocer que era yo quien lo sanaba.




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